Diez consejos para crear el rincón de lectura perfecto en casa

¿Te imaginas un espacio solo para ti, donde puedas perderte entre libros, tazas de té, cojines mullidos y mantas suaves? Pues deja de soñar y empieza a decorar, porque hoy te traemos los diez mandamientos para crear tu rincón de lectura perfecto, ese que parece sacado de Instagram pero hecho a tu medida. Ideal si amas la lectura, necesitas un espacio que sientas tuyo y te pirra un poquito (o mucho) la decoración con estilo.

Si eres una mujer lectora, multitasking, amante de los detalles bonitos y con alma de interiorista, estos diez consejos te van a venir que ni pintados para crear un rincón de lectura hecho a tu medida. ¡Vamos allá!

1. Elige con cabeza (y corazón)

No necesitas una biblioteca completa de dos alturas (¡aunque ojalá!) ni una habitación con chimenea, solo un rincón tranquilo. Puede ser junto a una ventana, un huequecito en el salón o incluso en tu propio dormitorio. Lo importante es que te inspire paz y ganas de abrir un libro.

2. La butaca, tu trono de reina lectora

Elige un sillón, chaise longue o butaca cómoda, porque te vas a pasar horas (sí, horas) ahí. ¿Nuestra recomendación estrella? Un modelo que tenga reposabrazos, que te permita mantener una postura cómoda (ojo a la espalda y a la cabeza) y, si la tapicería es de terciopelo, ya te coronas como reina de la decoración.

3. Luz, pero con mood

La iluminación de tu rincón de lectura es clave. Busca un espacio donde tengas luz natural a raudales. Y si eres una lectora más bien noctámbula, busca una lámpara de pie con luz cálida o una lámpara de lectura con brazo ajustable. Te salvarán la vista (y el ambiente).

4. Textura a tope

Tu espacio lector tiene que ser cómodo y bonito pero sobre todo, acogedor. Añade cojines mullidos, una manta suave de tamaño XXL o una de esas de punto gordo que ves en todos los reels de decoración. No van a conseguir sacarte de ahí ni con agua caliente.

5. Estanterías: el altar de tus libros

Aunque seguro que ya tienes libros repartidos por toda la casa, aprovecha tu rincón para colocar una pequeña estantería o una librería giratoria (las hay de distintas alturas) con aquellos títulos que tienes pendientes de leer. Es una manera práctica de tener tus lecturas favoritas a mano… pero sin sentimientos de culpa ni FOMO.

6. Verde que te quiero verde

Las plantas, al igual que los libros, son vida. Añade una monstera, un potus (resisten una guerra nuclear) o cualquier planta fácil de cuidar. No solo purifican el aire, está demostrado que las plantas también influyen (para bien) en nuestro estado de ánimo. Y encima hacen que tu rincón adquiera un aire de revista.

7. Añade una mesa auxiliar

¿Eres más de té o de café? Tanto da, porque este consejo vale tanto si eres del team tea como del team coffee. Un rincón de lectura sin una mesa donde dejar tu taza mientras pasas la página no entra en la categoría de rincón. Te aconsejamos una mesa pequeña y redonda. Si no quieres recargar visualmente el espacio, puedes buscar un modelo en metacrilato o con la superficie de madera en tonos claros.

8. Ojo al detalle

No hay nada que supere el olor de las páginas de un libro. Así que si añades a tu momento de lectura una vela aromática, un difusor de aceites esenciales, un spray con aroma natural o unas varitas de incienso, las sensaciones de confort pueden multiplicarse por mil. Recrear un mini spa es tan sencillo como escoger fragancias suaves y relajantes (lavanda, vainilla, sándalo…).

9. Música para desconectar

Además de oler bien, un buen rincón de lectura debe estar en silencio… A no ser que te guste leer con alguna melodía suave de fondo porque te ayuda a concentrarte. En ese caso, crea una playlist de lo-fi, jazz suave o sonidos de la naturaleza. Y apaga, eso sí, todas las notificaciones (ding ding, dong dong) de tus dispositivos.

10. Personalízalo con tu esencia

Fotos en formato Polaroid, frases que te inspiran, guirnalda con luces led, marcapáginas bonitos… Más allá de lo que te contemos, es tu rincón y son tus reglas. Crear un rincón de lectura no es solo decorar, es regalarte un espacio para reconectar contigo. No necesitas mucho, solo un poco de intención, estilo y amor por los libros y la lectura. Porque sí, leer es sexy, inspirador y terapéutico. Y si lo haces en un espacio bonito, mejor que mejor.

¿Lista para ponerte manos a la obra?